Tal vez haya
quien te pueda
prometer
un abrazo
de países con fronteras
de oberturas
de océanos y
licoreras,
de los más finos
placeres de la carne.
Tal vez haya
quien pueda
tapar el cielo con un dedo
o hacerte sombra
de pestañas
y castillos de naipes azules.
Yo no puedo
prometerte
más que las libélulas
que pintan mis paredes,
el jazmín paraguayo
que se enreda en la ventana
o la trinchera de mantas de colores
en las que juro
que estarás a salvo.
brindopornosotros